martes, 24 de agosto de 2010

MARATHON DU MONTCALM CHALLENGE DES 3000 ARIÉGEOIS


El jueves, salgo de Ainet de Cardós, dirección Auzat (Francia). Después de 3h40’ de viaje llego a Auzat, típico pueblecito de Francia, acampo en el Camping, cena y a dormir.

Al día siguiente por la mañana salgo a rodar un poco, después voy a ver algunos de los tramos por dónde tendré que pasar el domingo en la Maratón; por la tarde, paseo por Auzat, recogida del dorsal, Brieffing del cual no me enteré de nada y Pasta party, con el grupo Caroline Jazz Band, al acabar de cenar decido irme a dormir, aunque la fiesta durará aún unas cuantas horas.

El Domingo, a las 5h30’ me despierto, almuerzo una porción de pastel de carbohidratos (que gran invento) con un preparado isotónico y me preparo, ya que a las 7:00h se da la salida de la maratón.

A las 6:30h brieffing obligatorio, lo que me impide calentar correctamente y a las 7:00h se da la salida.

Los primeros 10 kilómetros, hasta el Parking de la Artigue son completamente planos con alguna que otra subida, intento coger mi ritmo desde el principio y que vayan pasando kilómetros.

Llego al Parking de la Artigue, ahora empieza la carrera en si, con una suba dura pasando por el Pla de Nouzere hasta el Refugio de Pinet 1.040m de desnivel en 5 kilómetros, que hago casi todo caminando, pasado Pinet el siguiente objetivo es llegar al Montcalm, el terreno en este tramo es completamente pedregoso y entretenido, teniendo que grimpar en más de una ocasión y pasando por algún nevero.

Desde el Col 2.900 subo primero al Motcalm 3.077 m, kilómetro 20 y después a la Pica d’estats .3.143 m, vuelvo al Col 2.900 para empezar una bajada larga, vertiginosa y técnica hasta el Parking de la Artigue kilómetro 32.

Por delante me quedan 10 kilómetros de toboganes, para llegar a meta, a medida que van cayendo los kilómetros la sensación de agarrotamiento de las piernas es palpable, tengo problemas con los pies, me duele todo en general parece como si todos los males salieran antes de tiempo, como si al acabar la parte más dura, el cuerpo se hubiera relajado sin mi consentimiento, aún así intento no parar de correr, porque se que como pare, ya no podré volver a correr de nuevo.

Los últimos metros de la Maratón por las calles de Auzat me permiten disfrutar del momento... haber acabado mi cuata maratón de montaña, la más dura, la más técnica pero la que más he disfrutado, al final entro en meta con un tiempo de 6h20’.


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